𝟬𝟯𝟯 | i'm proud of you, Sam
033. ┊໒ ⸼ 𝗖𝗛𝗔𝗣𝗧𝗘𝗥 𝗧𝗛𝗜𝗥𝗧𝗬 𝗧𝗛𝗥𝗘𝗘 ──
── 𝗂'𝗆 𝗉𝗋𝗈𝗎𝖽 𝗈𝖿 𝗒𝗈𝗎, 𝖲𝖺𝗆 •˖* 📼 ☄️
(denle amor a este capítulo o lloro <3)
Empacaba mis cosas en mi mochila, no es que llevara muchas pertenencias, en general solo está una camiseta extra, mis armas, y mi diario.
Mis armas las puse en mis cinturones, y mi chaqueta fue atada en mi cintura.
La celda que compartía con Sophia estaba ahora completamente vacía.
John nos informó que Carl ya estaba saliendo, así que nosotras también lo hicimos. Quería hablar con el menor Grimes, ya que estaba enojado con su padre por la decisión que él, junto al resto del grupo habían tomado.
Salí justo a tiempo para ver como Carl no dejaba que su padre lo tocara, ni que hablara con él.
─ Tu novio está de malas. ─murmuró Sophia.
─ Está enojado, es normal.
─ ¿Tambien contigo?
─ No conmigo, nunca conmigo ─sonreí, pero luego pensé ─. Pero no quiero que me oculte lo que siente solo para que yo sea feliz.
─ Que complicado es tu novio. ─refunfuño.
─ ¿Si sabes que tiene nombre, verdad?
─ ¿Quieres que le diga la sombra? ─pregunto soltando una risa, y yo negué, dándole mi mochila para que la suba al auto.
─ Hablare con Rick. ─informé, encaminándome donde el mayor.
Llegue a su lado, y él me dio una palmadita en mi hombro a penas me vio.
─ Ya se le pasara, no lo tome muy a pecho. ─aseguré.
─ No lo había visto así desde lo de Lori. ─murmuró, y yo hice una muequita.
─ Él tiene que entender que está es la mejor decisión para todos.
Rick me miro, no podía descifrar lo que su mirada quería decirme, así que pregunte:
─ ¿Por qué me mira así?
─ Estoy orgulloso de la mujer que eres, y en la que te estás convirtiendo, Sam.
Él gobernador había venido a atacar la prisión, se supone que yo debería estar ahí, peleando por nuestro hogar.
Pero me negaron en derecho a hacerlo, ambos hermanos Dixon me dieron un rotundo no, así que me vi obligada a obedecer.
Aunque ahí entendí mi labor es este momento, cada uno de tenía una. La mía era proteger a Judith.
Desde nuestra posición, vimos que todo estaba saliendo conforme al plan, no tenemos bajas, o eso creemos.
─ Yo debería estar ahí. ─refunfuño aún más enojado por la decisión de su padre.
Si, el rotundo no que recibí al ofrecerme a pelear, no solo fue de mi padre y mi tío, si no te todo el grupo, por unanimidad.
Además, habían decidido que lo mejor era que Hershell, Beth, Sophia, John, Carl, Judith y yo, nos quedáramos al margen de esto, escondidos entre unos arboles en el bosque.
─ Cada uno tiene que hacer una parte, la de nosotros es quedarnos aquí. ─le dije, mientras sostenía a la pequeña bebe entre mis brazos, cubriendo sus oídos todo lo que podía para que no fuera perturbada por el enfrentamiento.
De pronto, dejamos de escuchar disparos, sonreí, pero casi de inmediato sobresaltamos al ver a un chico con un arma venir en nuestra dirección.
Carl salía de nuestro escondite, y apuntó al chico, al igual que el resto, claro, menos yo, que no podía hacerlo porque tenía ambas manos ocupadas.
─ Baja el arma, hijo. ─pidió Hershell con calma.
Los ojos del chico denotaban miedo, pero accedió al pedido del mayor de los Greene. Empezó a bajar muy despacio su rifle.
─ Tomen. ─dijo, continuando con su acción.
Se estaba rindiendo.
Pero antes que dejara por completo su arma en el suelo, un disparo acabo con su vida.
Él acabo con su vida.
Carl lo había matado.
Regresamos a la prisión, Beth ahora tenía a Judith. Yo me encontraba enojada, enojada con Carl.
Al entrar, fui abrazada por papá, y tío Merle me despeino el cabello.
─ ¿Todo bien? ─me preguntó papá.
─ ¿Regresarán a Woodbury? ─inquirí con miedo, miedo de no volver a verlos, a ninguno de los dos.
─ Haremos todo lo necesario para que puedas vivir lo más tranquila posible, aunque sea en un mundo de mierda como este. ─aseguró Merle.
─ ¿R-regresarán vivos? ─pregunté con la voz temblorosa.
─ Siempre regresaremos a ti, hija.
─ Y siempre regresaremos vivos, Wanda.
─ ¿Por qué lloras? ─me preguntó John, mientras yo sorbía la nariz y me secaba algunas lágrimas con el dorso de mi mano.
─ C-Carl...
─ ¿Qué te hizo? ─preguntó con un tono de preocupación ─. No importa si es mi mejor amigo, si se merece un zape, tendrá un zape.
─ M-Mato a ese chico...arrebato una vida.
─ Lo sé, Sam. Y está mal, estoy de tu parte ─me apoyó ─. Wow, ahora se porque no le has hablado desde aquello. Estás enojada con él, y no te culpo, es una justa razón.
─ Yo lucho por salvar cada vida que me encuentre, si, se que es tonto, y que debo aprender a tirar del gatillo, pero no puedo. N-no puedo...aquel chico se estaba rindiendo, no era un peligro. Y-Y...Carl solo disparo...
─ Ven aquí ─John me envolvió en un abrazo ─, si alguien pregunta, nunca nos abrazamos, tengo una reputación que mantener.
─ No te robes mis frases, Walsh. ─balbucee.
No quedamos así por unos minutos, hasta que él habló:
─ Cálmate, tomate el tiempo que necesites, pero ve a hablar con Carl. No sé, grítale, tírale agua, dale unos cuantos zapes, pero debes hablar con él. Debe saber que piensas, en que crees.
Me separe de él, viendo a John a los ojos. ─ ¿Cómo sabes que decir? Suenas muy sabio.
─ Mi mamá era psicóloga, hablaba muy bonito, creo que de ella herede el don con las palabras. ─se encogió de hombros.
Estaba más calmada, y menos enojada. Use mi poder de la empatía para ponerme en el lugar de Carl, y es ahí donde comprendí, o eso creo.
─ Hey ─exclamó, acercándose a mi ─. Mara, ¿estamos bien?
Tome un gran bocanada de aire, y extendí mi mano para que él la tomara y se sentara junto a mi.
─ Debemos hablar sobre lo que hiciste. ─murmure, sin mirarlo aún.
─ Como quieras...pero al menos mírame. ─pidió, así que gire a verle.
─ Mataste a ese chico. ─balbucee.
─ Es lo que debía hacer.
─ No matamos personas, las salvamos. ─puntualicé.
─ No podemos salvar a todos, debes saberlo.
─ No, lo sé, soy realista ─acepté ─. Pero se puede intentar. Aquel chico estaba bajando su arma, su dedo nos estaba ni cerca del gatillo.
─ ¡Te protegí! ¿si? ─grito.
─ ¡Pero lo mataste!
─ ¡Solo quería que estén bien!
Esto es lo que quería.
─ ¡Estaba intentado protegerte a Sophia, a John, a Hershell, a Beth, a ti! ─exclamó frustrado, mientras sus ojos de cristalizaban ─ ¡Porque no quiero perder a nadie! ¡No quiero perderte a ti! ¡Te quiero mucho, Mara! ¡Mucho! ¡Mucho! H-hice lo que tenía que hacer para que los que quiero estén bien, y no me disculpare por eso.
─ No te pedí que te disculparas ─dije con calma, colocando una de mis manos en su mejilla ─, solo quería que lo dijeras en voz alta. No puedes reservarte todo, no puedes no gritarme, no puedes solo querer mostrarme la parte feliz de ti. Yo también te quiero, y por eso debemos hablar estas cosas.
Carl se lanzó hacia mi, me envolvió en un abrazo, mientras trataba que no lo oyera sollozar, pero luego de unos segundos, comprendido el fin de toda esta conversación.
Mi novio tiene miedo de perder a las personas, y protegería a los que quiere incluso si aquello representaría manchar sus manos.
Es admirable, pero él necesita alguien que lo salve, que lo proteja...
y esa seré yo.
Carl estaba a punto de besarme, cuando de pronto, la presencia, o más bien, el grito de alguien nos hizo sobresaltar.
─ ¿Se te perdió algo Woody falso? ─preguntó tío Merle a la distancia, mientras baja de su moto.
─ Será mejor...que huyas, ¡del país!, si. Tal vez así sobrevivas. ─dije con miedo, mientras Carl en verdad huía de mi, más de tío Merle que de mi.
Sonreí divertida, para luego correr hacia tío Merle y hacia papá. Él mayor de los hermanos, paso su brazo por mi, y me hizo dar unas vueltitas en el aire, para luego dejarme en el suelo y despeinarme.
Como ya era costumbre.
─ Te estaré vigilando. ─me amenazó tío Merle.
Papá por su parte, me dio una cálida sonrisa, y luego un abrazo.
─ Te dijimos que volveríamos, hija.
Es entonces, donde mi mirada fue hacia el autobús que había llegado con ellos. ¿Se lo robaron?
─ ¿Quiénes son? ─pregunté muy confundida.
Me había enfocado tanto en recibir a los hermanos Dixon, que recién caí en cuenta que venían más personas con la gente de nuestro grupo que fue a Woodbury a terminar con está guerra.
Muchas personas bajaban del vehículo, ancianos, niños, mujeres. Incluso logre divisar a Sasha y Tyresse ayudando a las personas a bajar.
─ Gente que se quedará con nosotros. ─escuche la voz de Rick responder desde atrás.
Giré sobre mis talones, y miré con una amplia sonrisa al señor Grimes, para luego decir:
─ Y yo estoy orgullosa del hombre que es, Rick.
[end of season three ]
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Com