I don't know.

Astral estaba acostada, en el piso de tierra, con sus ojos cerrados y con hojas secas enredadas en su cabello.

Sintio como Nico se acercaba a ella, manteniendo distancia, la miraba. Ella abrio los ojos lentamente mirando directamente al cielo, mezclado con las copas de los arboles.

Habían regresado al campamento y apenas pusieron un pie en el, el sermón de Quiron se hizo ver. Luego de algunas disculpas y sonrisas por parte de Astral, los dejó libres.

Miro hacia la derecha y se encontró un sonriente Nico, reposado en un arbol. Rodo los ojos, miro hacia la izquierda, sonrio al ver lo que se encontró.

Se sento y se acerco gateando hasta los hongos que había visto desde su lugar. Se quito la chaqueta de cuero que tenía puesto sobre un vestido negro.
Lleno el interior de su campera de hongos, asi como grandes, como chiquitos.

—¿Como sabes que no son venenosos?— dijo Nicolo al acercarse a la chica, sacándose su campera de aviador imitando a la chica.

Sabía lo que se cruzaba por la mente de Astral. La muchacha no había vivido la vida mundana que siempre soñó, y no podía negarse a satisfacer su curiosidad.

(***)

—Entonces... ¿son venenosos?- pregunto Piper tomando un hongo. Lo soltó y mirando la gran cantidad que habia. —¿Annabeth?— pregunto esperando una respuesta.

—Ni idea— dijo tomando uno y examinandolo.

—No sabemos si son venenosos, solo hay una forma de saberlo— dijo astral sonriendo mirando a todos los reunidos en la cabaña 1.

—Eso dices tu porque no puedes morir— dice Percy ironico.

—Pero puede agarrarme alguna enfermedad o algo, quien sabe— le contestó la diosa tomando un hongo.

Todos de apoco comenzaron a tomar uno, Astral dedicada a comerlo. Y asi fue, fueron todos comiendo unos tras otros hasta terminar. Ninguno sabía lo que hacía, solo era mera curiosidad.

—Y... ¿cuanto falta para que haga efecto?— pregunto Jason metiendose uno en la boca, tratando de ignorar el hecho que sabían horrible.

—No mucho— sonrió Astral maliciosa.