LA DISCO

EL GRUPO SE sentó en el sótano y Eric estaba repartiendo cartas para el juego que iban a jugar cuando Jackie saltó de la secadora y chilló.

—¡Voces interiores! —advirtió Lucy.

—¡Michael, van a abrir una discoteca!

— ¿Dónde?

—¡En Kenosha! Puedes ponerte tus pantalones de David Bowie.

— ¡Michael eso seria super!— Hyde se burló de Jackie.

— Ríete todo lo que quieras hombre, pero mi trasero se ve muy bien en esos. —se defendió Kelso.

—No he bailado en mucho tiempo. — Lucy se rió mientras Jackie la levantaba. Las dos empezaron a dar vueltas y a balancearse sin música.

— ¿Están locos? ¿En una discoteca? Estoy fuera. — dijo Eric mirando sus cartas.

—No sé, podría ser divertido ir a bailar. — Donna se encogió de hombros.

—O podríamos ir. — se animó Eric y Lucy se rió de lo azorado que estaba su hermano.

—Me rindo. —dijo Kelso mientras se levantaba.

—Bueno hombre si estás fuera ve a hacer palomitas-y llévatela contigo. —Hyde se volvió para mirar a Jackie y Lucy bailando.

Lucy gimoteó mientras arrastraban a Jackie escaleras arriba. —Mi pareja de baile. —continuó balanceándose y revoloteando su falda alrededor. —¡Steven ven a bailar conmigo! —se rió mientras trataba de tirar de él hacia arriba.

—Eso no va a pasar, muñeca. —él no se movió.

—¡Bailaré con la bella dama! —Fez se levantó de un salto y empezó a darle vueltas a Lucy. —Espera, ¿qué es la disco? —dijo sin dejar de bailar.

—Disco es del infierno, ¿de acuerdo?— Hyde empezó. —¡No la parte cool del infierno con todos los asesinos, sino la parte donde viven todos los malos contadores!

—No le hagas caso, Fez. —dijo Lucy sin dejar de bailar. —En las ciudades se baila disco. Y la gente de ciudad sabe lo que es genial. Es la gente como el Sr. Aguafiestas aquí, que no saben lo que es cool.

—Eso es lo que el gobierno quiere que pienses. —susurró Hyde.

—Donna, disculpa ¿qué estás haciendo?— Eric preguntó.

—Mirando las cartas de Kelso. —dijo ella despreocupadamente mientras alcanzaba un cruzó la mesa.

—¡Eso es hacer trampa!—Eric gritó.

—¡Eric, no podemos encontrar las palomitas!— Jackie gritó desde arriba.

Eric comenzó a levantarse, pero se dejó caer de nuevo en el sofá. —Hey Donna, ¿por qué no echas un vistazo a mis cartas ahora para que no tengas que esperar a que me vaya? No, adelante, echa un vistazo. —le puso las cartas en la cara a Donna.

—¡No tienes nada!— Dijo Donna.

—¡Sí y voy a farolear así que ten cuidado!— Eric corrió escaleras arriba.

Fez hizo girar a Lucy de nuevo y Hyde la tiró en su regazo, Fez hizo un puchero y se sentó de nuevo en su asiento. —¿Donna tiene cosas por Eric si?— Fez preguntó.

—Cosa. —Hyde y Lucy corrigieron a la vez.

Donna enterró la cabeza entre las manos.

—¿Por qué tienes algo por mi hermano? Quiero decir, lo quiero, pero es escuálido, bocazas, sin carácter, al borde de la falta de dirección...— Lucy contó con los dedos.

—Me hace reír, no me hace preguntas estúpidas, es listo, ya sabes...— Donna se encogió de hombros.

—No, no lo sé porque yo también soy así. Y soy mucho más guapa que Eric, así que creo que has elegido al gemelo equivocado. —Lucy se señaló a sí misma.

Donna puso los ojos en blanco y Hyde se rió.

Fez agitó la mano en el aire: —¡Yo sé!

—¡Sí! Fez!— Hyde lo llamó.

—Es porque Eric es noble y una mujer quiere que su primer enamoramiento sea en brazos de un hombre en quien pueda confiar. —cruzó las manos en su regazo. —Es subconsciente, por eso también Lucy está siempre contigo. No puede confiar en mí debido a mi ruda belleza.

—Fez, ve a hacer palomitas de maíz. —dijo Hyde, sus brazos alrededor de Lucy se aflojaron.

Sin pensarlo, Lucy se empujó fuera de Hyde y se sentó en el reposabrazos, asomándose por encima de Donna para mirar sus cartas. —¡Tú tampoco tienes nada!—Lucy gritó mientras Donna se giraba para abofetearla.

❁

Eric consiguió convencer a sus padres de que les permitieran quedarse fuera hasta más tarde para volver de Kenosha. Sin embargo, no pudo convencerles de que les ayudaran con el dinero para la gasolina; después de rebuscar entre su dinero, que guardaba escondido bajo el colchón, Lucy pudo ayudar un poco, pero aún no era suficiente para el viaje.

Lucy se apoyó en el frigorífico del garaje mientras los chicos buscaban latas para recoger.

—Todavía no puedo creer que Jackie y tú arrastren a todo el mundo a esa discoteca. Tan triste. —Hyde miró a Kelso. —Quiero decir que la entiendo. —los ojos de Hyde se desviaron hacia Lucy que estaba inspeccionando su manicura.

—¿Qué? Así que me gusta bailar. —Lucy agitó la mano con desdén.

—No, sólo voy a conocer chicas de Kenosha. Estoy rompiendo con Jackie. —dijo Kelso a la defensiva.

—Tal vez en lugar de arrastrarla a lo largo de tu propio placer deberías en realidad romper con ella. O si de verdad te gusta, defiéndela cuando los imbéciles de tus amigos se burlen de ella. —Lucy frunció los labios.

—Pssh ¿qué sabes tú?— Kelso la miró confundido por lo que había dicho.

Lucy se limitó a poner los ojos en blanco.

—Búscate una chica alta. Jackie y tú parecéis tan tontos juntos. —dijo Fez pensativo.

—¡Las chicas bajitas no están tan mal!— Lucy habló a la defensiva mientras hacía pucheros.

—Claro que no pequeño monton de cosas.— dijo Eric mientras cogía otra lata.

—¡Snicklefritz!— Lucy señaló a su hermano.

—Vale, esas son todas las botellas de depósito, necesitamos latas de aluminio. Tenemos que tener por lo menos $ 1.15 de gas. —Eric miró a su padre, en silencio rogándole que ayudar a pagar por el gas.

—Vamos, mi padre tiene una tonelada de envases vacíos. —dijo Kelso mientras los cuatro salían del garaje.

—Steven, ¿vienes?— Lucy asomó la cabeza de nuevo en el garaje, para ver a Hyde y su padre hablando.

—Si quieres ir a bailar muñeca, tienes que pagarlo tú misma. Yo no voy. — dijo Hyde.

Lucy simplemente se burló y salió para ayudar a encontrar latas para pagar su viaje.

❁

Lucy caminó a través de la cocina a la sala de estar. —Mamá ¿sabes dónde está mi... —se detuvo en seco cuando abrió la puerta ligeramente.

Vio a Hyde y a su madre bailando en el salón, Lucy tuvo que reprimir una carcajada mientras cerraba la puerta en silencio y volvía a entrar en la cocina. Se puso contra la pared y se tapó la boca con las manos. Steven Hyde no sabía bailar y la pobre tenía a su madre enseñándole. Una vez que se serenó, se dio cuenta de que no había necesidad de que Steven aprendiera a bailar si no iba a ir a Kenosha. No podía imaginarse qué le había hecho cambiar de opinión.

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El grupo estaba todo fuera, Kitty había corrido al interior para coger una cámara y bombardearles con fotos.

Lucy dio un golpecito con el pie, lista para acabar con las temidas fotos y llegar a Kenosha. Jackie la había ayudado con su atuendo y maquillaje; estaba increíble con su enterizo negro escotado, Red casi no la había dejado salir de casa pero Jackie le había dado rápidamente una chaqueta vaquera con la que cubrirse hasta que salieran de la casa.

Lucy empujó a Eric, que la miró extrañado hasta que Lucy empezó a asentir hacia Donna, animándole a que fuera a hablar con ella.

—¡Ya estamos listos para hacer fotos!— exclamó Kitty mientras agitaba su cámara. Empezó a disparar mientras el grupo hacía poses idiotas.

—¡Steven acércate!— Kitty ordenó. —¡Vale, vamos a aplastarnos todos juntos! Ahora solo las chicas!

Los chicos se hicieron a un lado mientras Jackie, Donna y Lucy miraban estoicamente a la cámara. Los chicos se burlaron de ellas detrás de la cámara, haciendo que el trío se partiera de risa. Entonces los chicos intervinieron y tomaron fotos ridículas mientras Kitty hacía clic.

—¡Muy bien, grandes sonrisas!— les recordó Kitty.

Eric se adelantó: —Oye mamá, ¿por qué no te hago fotos?

—Oh no, no no. Ahora váyanse, llegarán tarde. —Kitty los condujo al coche.

Todos se amontonaron, excepto Steven que susurró algo a Kitty y la besó en la mejilla. Midge la miró sorprendida.

—¿Te gustan las mujeres mayores?— Lucy sonrió con satisfacción mientras permanecía de pie junto a la puerta abierta del coche mientras Steven se deslizaba en su asiento.

—Cállate. —murmuró, agarrándola por la cintura y tirando de ella hacia su regazo mientras el Vista Cruiser arrancaba y se alejaba de la entrada.

❁

Llegaron a la discoteca y Jackie tiró al instante de Lucy hacia la pista de baile. Lucy puso los ojos en blanco cuando su amiga la abandonó rápidamente para bailar con Michael, que parecía tener un ataque.

En cuanto Lucy se quedó sola, los chicos de la pista se arremolinaron rápidamente a su alrededor, uno de ellos consiguió atraerla a su lado y la pareja empezó a bailar. Antes de que terminara la canción Eric la había arrancado de las garras del chico, ella suspiró ante el carácter protector de su hermano y fue arrastrada a sentarse junto a una Jackie que hacía pucheros.

—No deberías bailar con chicos así. —la regañó Eric.

—Bailaré como me dé la gana, hermanito. —se burló Lucy.

—Los chicos así son problemáticos. —dijo Hyde mientras él y su hermano miraban al chico moreno vestido de cuero que se pasaba un porro con sus amigos en la esquina, mirando fijamente a Lucy al otro lado de la habitación.

—Vale abuelo. —suspiró ella.

— ¡Al menos bailaba bien! —Jackie suspiró mientras miraba a su novio, decepcionada.

Kelso se acercó de nuevo a la mesa confundido: —Jackie, ¿a dónde fuiste?

—¡Tuve que ir a buscar algo para que mordieras porque les dije a todos que estabas teniendo un ataque! —gritó ella frustrada.

— ¿Cuándo ponen la música disco? —preguntó Fez.

—Esto es música disco. —respondió Eric, confuso.

— ¡No, no, esto es samba! —Fez asintió.

—Fez, es música disco hombre, es una mierda. —dijo Hyde poco impresionado.

—Oh ... Creo que me gusta esta mierda. Ven Jackie, vamos a bailar. —Fez se puso de pie, agarrando la mano de Jackie.

—No, creo que estoy un poco cansada. —dijo Jackie, lanzando una mirada a Lucy en busca de ayuda.

—No te me resistas, mama. —Fez inclinó la barbilla de Jackie hacia él.

Lucy se rió, mientras empujaba a Jackie de su asiento para que Fez literalmente la barriera de sus pies.

—Creo que perdiste tu cita. —Donna miró a Kelso.

—¡Sí, está bien porque Jackie y yo somos historia!— Kelso grito, esperando que Jackie escuchara.

El grupo se volvió para ver como Jackie y Fez bailaban. La pista de baile, literalmente, despejado para hacer espacio para ellos. Fez levantó a Jackie y la hizo girar.

—No debe pesar tanto. —dijo Eric dubitativo.

—¿Le está tocando el culo?— Kelso gritó como la pierna de Jackie envuelto alrededor de Fez y continuaron bailando.

La pareja estaba a punto de salir de la pista de baile cuando llegó la siguiente canción y Fez arrastró a Jackie de nuevo. —¡Escucha! Merengue!

—¡Son realmente buenos!— Donna señaló.

—Sí, si quieres bailar así. —se enfurruñó Kelso.

—Lo haría, pero alguien me apartó. —Lucy cruzó los brazos delante del pecho.

— ¿Quieres bailar?— Hyde se volvió rápidamente hacia Lucy.

— ¿Contigo?— ella golpeó su dedo en la barbilla, como si pensara. —Claro. —sonrió.

Hyde se levantó y le tendió la mano. Lucy sonrió, le cogió la mano y ambos se dirigieron a la pista de baile. Él tiró de ella y los dos bailaron al ritmo de la canción lenta que sonaba.

—¿Y qué? ¿Ya has bailado con casi todas las mujeres de Forman? —preguntó Lucy con una sonrisa burlona.

—¿Lo sabías?

— Bueno, no te he visto bailar ni un solo día de tu vida, así que sí, me lo imaginaba. —se rió entre dientes. —Además te vi bailando el vals con mi madre.

—Ah, me pareció sentir una bajada de temperatura, debe haber sido tu corazón frío. —se burló.

—¡Cállate! —se rió ella.

Su sonrisa vaciló un poco cuando levantó la vista hacia él. —Esto es bonito —dijo en voz baja.

—Te dije que la discoteca era cool —intentó bromear, pero su voz se quebró cuando él no apartó la mirada de ella.

—No, no lo es. —sonrió él mientras la acariciaba. —Lucy, siento que quiero besarte —susurró.

Lucy soltó una risita nerviosa, pensando que se estaba burlando de ella.

—No tienes que devolverme el beso si no quieres -dijo él. A Lucy se le iluminaron los ojos y estaba a punto de burlarse de él cuando dijo: —No bromeo.

—Vamos a bailar. —susurró ella, demasiado sorprendida para decir nada más.

La canción terminó y los dos se apartaron rápidamente, como si salieran de un sueño. Ambos ocultaron desesperadamente que deseaban no haberse despertado.

❁

La pandilla se dirigía al coche para marcharse. Lucy había llegado al coche y maldijo. — He dejado la chaqueta, ahora vuelvo.

Volvió corriendo a la discoteca y corrió hacia la mesa buscando su chaqueta sin poder encontrarla.

—¿Buscas algo? —preguntó una voz. Se dio la vuelta y vio al chico con el que bailaba antes, dándole vueltas a su chaqueta.

—¿Así es como llamas la atención de una chica? ¿Robándole sus cosas? —Lucy sonrió satisfecha.

—Sólo a las guapas. —se encogió de hombros el chico. Se acercó a ella y ella cruzó los brazos, con una sonrisa en los labios. —¿Cómo te llamas? —preguntó el chico, devolviéndole la chaqueta.

—Lucy Forman, ¿y tú? —preguntó ella con indiferencia, tratando de parecer desinteresada, era lo que Jackie le había dicho que hiciera.

—Nick Thompson. —imitó su tono desinteresado. —Así que ese chico con el que estabas bailando, ¿es tu novio?

—¿Steven? Oh dios, no. — No pudo evitar reírse.

—Bien. Entonces, ¿puedo llamarte? —preguntó Nick.

Lucy dudó un momento,

—Claro. Pero tienes que memorizar el número.

—¿En serio?— rió el chico con incredulidad.

—En serio. Si no lo memorizas, sé que no te ha importado lo suficiente. —sonrió ella con suficiencia.

Nick volvió a reír. —Eres lista, me caes bien. ¿Cuál es el número?

Lucy se rió y le dio su número antes de oír el bocinazo del Vista Cruiser fuera y salir corriendo para no hacerles esperar.

vieron el nuevo cover?? lo hice con mucho amor😘