☾ *.ﾟ｡╻┃ CAPÍTULO 03
peleas divertidas ☾ *.ﾟ｡╻┃
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❝ '¡yo dije veintidós! ❞
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ISAAC Y CAROLINE SE habían sentado en la cama hace un par de minutos, mientras Isaac pensaba cómo contarle lo que eran. Si bien, usualmente mentiría y diría que los cazadores eran unos ladrones, algo en el aroma de Caroline le hacía saber que ella también era diferente. Probablemente no como ellos, pero ya lo descubrirían con el tiempo.

───todo empezó hace un par de años, al menos cuatro. En un pueblo lleno de criaturas sobrenaturales, como hombres lobo... ───murmuro, viéndola a los ojos. ───como nosotros, también kitsune's, hombres coyote, espíritus malignos y muchas otras más. Un grupo de cazadores comenzó a convencer a la gente de que nosotros éramos peligrosos, usaron el miedo para hacer que nos odiaran. La manada del pueblo los detuvo y convenció al pueblo de sus buenas intenciones...

»sin embargo eso no detuvo a los cazadores, y a pesar de ya no ser bien recibidos en aquel pueblo, se extendieron casi por todo el mundo. Londres, Paris, California. La manada de la que te hable... ellos han estado luchando por encontrar a la líder de los cazadores desde entonces, quieren detenerlos y que vuelva la paz, hasta que eso pase, Luke, Conner y yo hemos estado ocultos, intentando protegernos entre los tres y proteger este pueblo.

───son muy valientes. ───le dijo sintiéndolo de verdad, ella había pasado unos minutos con los cazadores detrás y había entrado en pánico. Isaac le sonrió en agradecimiento con las mejillas levemente sonrojadas. ───¿puedo verte transformado? Como antes, cuando peleabas con los cazadores.

El rubio estuvo a punto de negar, sin embargo, algo en la inocente mirada de la chica lo convenció y presintió que este no sería el último capricho que le concediera a la rubia. Tras un largo asentimiento, Isaac torció un poco el cuello, transformando su rostro en el de un hombre lobo.

Caroline río impresionada, viéndolo directamente a aquellos electrizantes ojos amarillos. Recordaba que los de Conner eran diferentes, eran de un color azul. La chica pasó la mano por la mejilla de Isaac, examinándolo curiosamente hasta que este volvió a su rostro completamente humano.

»───son bastante graciosos. ───se burló divertida. Ahora decía eso, pero antes casi se desmayaba del susto.

───un poco, si.

La rubia sintió algo en el bolsillo de su sudadera, por lo que bajo la atenta mirada de su salvador, del bolsillo sacó un pequeño collar de plata con un dije redondo y una P grabada.

»───parece que es tuyo. ───adivinó Isaac, sin ninguna otra respuesta. Caroline asintió sin despegar su vista del collar, intentando recordar aunque sea un poco. ───¿quieres que te lo ponga?

───por favor.

Ambos se levantaron y Caroline se dio la vuelta, dándole la espalda a Isaac, el mayor tomó el collar en sus manos y levantó un poco el cabello rubio de la chica, frunciendo el ceño al notar algo. Colocó rápidamente el collar y la arrastró hasta uno de los espejos.

───mira esto. ───murmuro haciendo que su cuello se viera en el espejo. Caroline volteó un poco la mirada notando como unas marcas extrañas se encontraban en este, Isaac pasó la mano lentamente por la zona, causándole un escalofrío y avergonzándola. ───parecen hechas por un hombre lobo, sin duda son las marcas de unas garras.

───¿un hombre lobo me atacó? ───le pregunto temerosa, quizás el hombre lobo aún la buscaba. Quizás era Isaac y solo quería despistarla.

───no lo se, es decir... no tienes mas heridas. Tal vez... sabes... una vez un hombre lobo me clavo sus garras para recuperar mis recuerdos. Supongo que si pueden recuperarlos... también pueden quitarlos. ───le explicó recordando a Peter.

───¿puedes recuperar mis recuerdos? ───la esperanza en los ojos de Caroline fue difícil de ver, Isaac negó con remordimiento.

───lo siento, Care. Pero es muy peligroso, nunca lo he intentado y no quiero hacerte daño.

Caroline suspiró entristecida. ───descuida, yo entiendo.

───bueno... dormirás aquí sola pero vamos a tener que compartir el closet y el baño, el otro lo usan Luke y Conner y es un completo desastre. No te recomiendo entrar ahí. ───murmuro haciendo reír a Caroline. ───escucha, te prometo que haré todo lo posible para que estés a salvo y recuerdes qué pasó contigo. Solo tienes que confiar en mi, ¿si?

Isaac le pedía a Caroline que confiara en ella por tercera vez en el día y bueno, por tercera vez, Caroline asentía. Confiando ciegamente en el.

───¡ey! Prepare la cena, ¿vienen? ───preguntó Luke entrando con una sonrisa amigable.

Los tres chicos, incluso Conner, habían inspirado la suficiente confianza en Caroline como para que se permitiera quedarse con ellos tranquilamente hasta que sus recuerdos volvieran.

Una vez en el comedor, Caroline observó atentamente cómo los tres chicos que la habían recibido bromeaban entre ellos y hablaban con facilidad. Con tan solo cinco minutos, la rubia los había descifrado casi completamente, Luke, parecía ser casi igual de nuevo que ella, porque los otros dos no lo mencionaban en las anécdotas que contaban, además, parecía que aún estaba conociéndolos.

Conner, por otro lado, parecía sentirse extremadamente cómodo con Isaac, mientras que analizaba a los otros dos como si fueran unos intrusos. Aún así, se mostraba amable con Caroline y juguetón con Luke, era bastante divertido ver las peleas de los dos menores.

En cuanto a Isaac, Caroline pudo descubrir rápidamente que era el líder del grupo, no solo por ser el mayor sino por tener más experiencia. Caroline observaba fascinada al mayor contar sus aventuras con la manada de su pueblo y a la vez, veía sus ojos melancólicos y se preguntaba ¿que era lo que lo había hecho alejarse?

───ey, Caroline. ¿Recuerdas tú edad? ───preguntó Luke terminando de masticar.

Caroline se encogió de hombros negando incómodamente, no recordaba su edad, pero presentía menos de veinticuatro.

───quizás unos veintidós. ───adivino Conner, viéndola fijamente. La mirada profunda la hizo removerse nerviosa.

Pronto, la rubia se encontró con tres miradas masculinas examinándola con curiosidad.

───apuesto por veintiuno. ───acordó el mayor divertido, desviando la mirada para seguir comiendo.

───yo veintidós.

Conner golpeó a Luke en la cabeza. ───¡yo dije veintidós!

───no otra vez, chicos. ───se quejó Isaac golpeando levemente su cabeza con la mesa.

Caroline sonrió levemente, las mejillas de Conner se habían teñido de un rojo intenso al igual que sus orejas, probablemente por el enojo. Mientras que Luke le sonreía poniendo ojos de cachorrito arrepentido, ambos parecían tener la misma edad o incluso Conner podría ser un año menor que Luke, sin embargo sus personalidades decían lo contrario.

La rubia inmediatamente supo que esos dos no eran exactamente mejores amigos, sin embargo, el brillo que Caroline había alcanzado a distinguir en los ojos de Conner la había dejado dudando. Mientras que los menores continuaban con su disputa, los ojos de los mayores se encontraron y sonrieron cómplices, ambos pensaban que entre tantas peleas, quizás los menores encontraban la manera de decirse cosas que no se dirían normalmente.