⠀𝟭𝟮. ❛ STEVE VS. JONATHAN ❜
CAPÍTULO DOCE ╱ STEVE VS. JONATHAN
EL GRUÑIDO BAJO COMENZÓ UNA VEZ MÁS.
⠀⠀Carla se despertó al oírlo, con la respiración entrecortada al reconocer las enredaderas y las partículas de polvo del otro mundo, del lugar en el que realmente había estado aquella noche, el lugar al que el monstruo llamaba hogar.
⠀⠀Todavía estaba entre Jonathan y Nancy cuando se incorporó lentamente. Con los ojos fuertemente cerrados, la Wheeler se deslizó fuera de la cama; supuso que su hermana y su amigo tendrían el mismo aspecto que su padre en la pesadilla anterior, y decidió no mirarlos. Sólo conseguiría aterrorizarse más ante lo que estaba por venir.
⠀⠀De repente, una voz suave y temblorosa comenzó a abrirse paso silenciosamente por la casa. La voz familiar hizo que la morena se detuviera, y un destello de esperanza brilló en su interior: Will. Era Will cantando.
⠀⠀—Should I stay or should I go now...
⠀⠀Carla sabía que no debía sentirse demasiado esperanzada al oír la voz de Will; ya no sabía lo que era real y lo que era falso con todo este asunto del monstruo, con descubrir que este lugar y esta criatura eran algo más que fantasía. Pero esa era la razón exacta por la que estaba esperanzada.
⠀⠀Si el monstruo estaba vivo... quizá Will también lo estuviera.
⠀⠀—¿Will? —gritó Carla sin aliento. Si el canto susurrante del Byers era escuchado, su grito seguramente sería oído por él—. ¿Will? ¿Eres tú? Estoy aquí otra vez, ¡es-estoy aquí para intentar ayudarte!"
⠀⠀—¿Carla? ¡Carla!
⠀⠀—¡Will! —Carla se levantó rápidamente al oír su voz y salió corriendo de su dormitorio. Saltando por encima de tantas enredaderas como le fue posible, la Wheeler salió fácilmente de su casa azul pero de alguna manera oscura, ya que seguía siendo la misma que su verdadero hogar.
⠀⠀De su jardín delantero no podía decir lo mismo.
⠀⠀En lugar de ser su vecindario, su patio delantero era el bosque en el que ella, Jonathan y Nancy habían estado aquel día. Los árboles tenían viscosidad, slime y todo tipo de porquería adherida a la corteza, que se arrastraba lentamente hasta el tronco, pero Carla no tardó en fijarse en el árbol que sostenía el portal que los había llevado a aquel lugar.
⠀⠀Lo que significaba...
⠀⠀—¡Carla!
⠀⠀La voz de Will sacó a la Wheeler de sus pensamientos, y miró delante de ella para ver a Will. Tenía la piel enfermizamente pálida, la ropa cubierta de slime y el pelo pegado a la frente por el sudor y la mucosidad.
⠀⠀Pero, no obstante, Carla nunca se había alegrado tanto de ver al pequeño.
⠀⠀—Dios mío, Will —exclamó la morena, corriendo rápidamente hacia el chico y envolviéndolo en un abrazo. Ni siquiera le importaba si era producto de su imaginación o si realmente era Will. Se sentía tan jodidamente bien abrazarlo, verlo en carne y hueso después de todo—. ¿Estás bien? La criatura...
⠀⠀—No, aún no me ha cogido. He estado corriendo y escondiéndome —explicó Will, con los ojos desorbitados.
⠀⠀—Bien, Will, ¿ves ese árbol con un agujero? —Carla señaló detrás de ella, hacia el portal. El chico Byers asintió y ella continuó—. Si este lugar es como Hawkins pero no, ese portal debería llevar de vuelta al bosque de Hawkins. Si vas hacia el sur, acabarás en casa de Steve Harrington, ¿te acuerdas de él, mi ex? —Will volvió a asentir—. Toca el timbre y...
⠀⠀La chica fue interrumpida por el gruñido de un monstruo.
⠀⠀Los dos adolescentes se volvieron para ver a la criatura de pie junto a ellos.
⠀⠀Will tenía una mirada horrorizada en los ojos mientras prácticamente la empujaba hacia el bosque.
⠀⠀—¡Carla, corre por ese agujero! ¡Yo lo detendré!
⠀⠀Carla quería luchar, pero no quería volver a encontrarse con la criatura. Así que, mientras Will corría en otra dirección, ella se zambulló en el agujero y empezó a gatear.
CARLA SE SENTÓ ERGUIDA, ALERTA.
⠀⠀Observó todo a su alrededor, su respiración se ralentizó cuando se dio cuenta de que estaba en la habitación real de su hermana: no había enredaderas ni partículas de polvo, y la luz entraba suavemente por la ventana, cosa que no ocurriría allí.
⠀⠀Jonathan Byers estaba a su lado, roncando suavemente, y la Wheeler se sintió aliviada al ver que no tenía la cara contorsionada y desencajada.
⠀⠀Había vuelto.
⠀⠀—Carla, estás bien —sintió una mano en el hombro y rápidamente giró la cabeza para ver a Nancy. La chica parecía estar completamente despierta, supuso que no era la única que había tenido un despertar abrupto—. ¿Una pesadilla?
⠀⠀Carla asintió lentamente.
⠀⠀—Sí...
⠀⠀—Oh... —Jonathan gimió de repente desde el lado de la morena, el chico se había despertado por el cambio de peso y el sorprendido temblor de Carla. Sentándose, saludó con sueño—. Hola.
⠀⠀—Hola —contestó Nancy. Carla le envió una suave sonrisa también.
⠀⠀Mirando a las dos, Jonathan preguntó:
⠀⠀—¿No puedes dormir?
⠀⠀Carla frunció el ceño.
⠀⠀—Una pesadilla, otra vez.
⠀⠀—Cada vez que cierro los ojos, no sé... no paro de ver esa... cosa —Nancy respondió en voz baja, los recuerdos enviando escalofríos por su espina dorsal—. Fuera donde fuera ese lugar, donde estuvimos, creo que vive allí. Se estaba alimentando. Se estaba comiendo al ciervo. Significa que si... que si Will y Barbara... —la Wheeler parecía que iba a echarse a llorar al pensar en su amiga y el joven atrapados con esa criatura, en su coto de caza.
⠀⠀—Eh —Jonathan se inclinó hacia Nancy, queriendo consolarla—. Mi madre dice que habló con Will. Si él está vivo, es posible que Barbara también.
⠀⠀—Eso significa que está atrapada... en ese lugar —Nancy respondió en un tono triste, su voz un susurro hacia el final—. Tenemos que volver a buscarlo.
⠀⠀—¿Quieres volver al bosque? —preguntó Jonathan, mirando a Nancy.
⠀⠀—Creo que deberíamos... pero no así, al menos —Carla respondió, recordando la noche anterior. Recibió una mirada extraña del Byers, y comenzó a explicar—. Cuando Nance y yo lo vimos, se estaba alimentando del ciervo, significa que es algo así como un depredador, un carnívoro, creo que todos estamos de acuerdo.
⠀⠀Jonathan asintió.
⠀⠀—Y parece que caza de noche, como... como un león o un coyote —Nancy captó la idea que su hermana intentaba transmitir—. Pero no caza en manada como ellos.
⠀⠀Carla asintió.
⠀⠀—Estoy de acuerdo. Parece que sólo hay uno, que sepamos, que ha estado atacando la zona. Es solitario, como un oso o algo así —hizo una pausa antes de que una bombilla brillara dentro de su mente—. Y, en casa de Steve, cuando Barb se cortó la mano... estaba sangrando...
⠀⠀—Y luego, anoche, el ciervo...
⠀⠀—También sangraba —terminó Jonathan.
⠀⠀—Sí —murmuró Nancy, abriendo otro libro que yacía sobre su cama; Carla supuso que ésa había sido la razón por la que su hermana había estado completamente despierta cuando se incorporó bruscamente—. Los tiburones detectan la sangre en una parte por millón. Es una gota de sangre en un millón, y pueden olerla a 400 metros.
⠀⠀Jonathan miró a las Wheeler, asegurándose de que entendía por dónde iban.
⠀⠀—Quieres decir que puede detectar la sangre.
⠀⠀—Es una teoría.
⠀⠀—Pero una buena, una digna de ser probada —Carla miró a los dos adolescentes. Claro que aquella criatura la asustaba, pero... necesitaba saber si tenían razón, si esta era una forma de recuperar posiblemente a Will—. Todo lo que necesitamos es un poco de sangre y un poco de tiempo.
⠀⠀El Byers las miró con seriedad.
⠀⠀—Pero, si funciona...
⠀⠀—Al menos sabremos que se acerca —Nancy terminó, suave pero confiadamente.
⠀⠀Antes de que nadie pudiera decir nada más, el pomo de la puerta empezó a sonar, haciendo que los tres adolescentes se sobresaltaran; no ayudaba el hecho de que acabaran de hablar del monstruo, con los nervios a flor de piel.
⠀⠀—Cariño, ¿estás despierta? —al oír la voz de Karen Wheeler, Carla dejó escapar un suspiro de alivio. La mujer siguió haciendo tintinear el pomo de la puerta y preguntó—. ¿Está Carla ahí dentro contigo? No está en su habitación.
⠀⠀—¡Aquí, mamá! —Carla volvió a llamar, intentando sonar lo menos alterada posible—. ¡Nance y yo estábamos repasando unos deberes de última hora!
⠀⠀—Sí, me estoy vistiendo —continuó Nancy.
⠀⠀—He preparado tortitas de arándanos.
⠀⠀—Bajaremos en un momento —Nancy afirmó con firmeza.
⠀⠀Al oír los pasos de Karen que se alejaban, los tres adolescentes soltaron un suspiro colectivo, sin notar Carla la forma en que la mano de su hermana se soltó de la de Jonathan.
⠀⠀Hubo silencio un momento antes de que Jonathan riera entre dientes.
⠀⠀—¿Tu madre no llama a la puerta?
⠀⠀Los tres adolescentes soltaron una suave carcajada antes de volver a ponerse serios.
⠀⠀Tenían un monstruo al que cazar.
CARLA NUNCA HABÍA ESTADO EN UNA HABITACIÓN CON TANTOS OBJETOS PELIGROSOS.
⠀⠀Tras escapar de su casa por la ventana de Nancy, el trío se dirigió al centro de Hawkins, a una especie de tienda en la que, según Jonathan, encontrarían los materiales que necesitaban para su plan... y vaya si tenía razón.
⠀⠀La Wheeler no estaba segura de cómo eran los materiales para cazar monstruos, pero este lugar parecía tenerlos. Todas las estanterías estaban repletas de pistolas, pinchos, bates, gasolina, trampas para osos, espadas y cuchillos; prácticamente cualquier arma que pudieras imaginar se encontraba en algún lugar de la tienda.
⠀⠀Carla se paseaba por los pasillos, intentando averiguar qué sería realmente útil; por supuesto, cualquier tipo de arma sería de ayuda, pero no quería comprar algo que nunca acabaría utilizando. Nancy hacía lo contrario, añadiendo ciegamente a su cesta cualquier cosa que le pareciera remotamente peligrosa, mientras que Jonathan hacía ambas cosas, comprobando los artículos antes de meterlos en su cesta.
⠀⠀Una vez que concluyó sus compras, Carla se acercó y dejó sus cosas sobre el mostrador. Jonathan y Nancy la acompañaban, colocando una trampa para osos, gasolina, cerillas y mazos, además de otras armas que la Wheeler debían de haber pasado por alto a juzgar por la variedad que reunían su hermana y su amigo.
⠀⠀Como si lo que habían conseguido no fuera suficiente para fulminar los ojos del hombre del mostrador, Jonathan añadió:
⠀⠀—Y me llevo cuatro cajas del calibre 38.
⠀⠀El hombre hizo lo que le pedían, cogió la caja de balas y se las entregó. Mirando todas las armas, no pudo evitar preguntarse para qué las necesitaba el trío: nunca había visto a un grupo tan joven venir a comprar un montón de armas como éste.
⠀⠀—¿Qué vais a hacer con todo esto?
⠀⠀Los tres se miraron distraídamente antes de que Nancy se encogiera de hombros.
⠀⠀—Cazar monstruos.
⠀⠀—Ah.
⠀⠀El hombre no preguntó nada más y cobró el total.
⠀⠀Después de haber empaquetado y pagado sus artículos —cosa que los tres hicieron por igual, dado que todos formaban parte de esta cacería—, el trío salió de la tienda, Jonathan incapaz de contener la risa.
⠀⠀—¿Cazar monstruos?
⠀⠀Carla se encogió de hombros.
⠀⠀—¿Qué otra cosa iba a decir? Además, no es como si alguien fuera a creernos.
⠀⠀Jonathan abrió el maletero de su coche y él y Carla colocaron dentro las cajas y las armas. Desde su lado, Nancy dijo incrédula:
⠀⠀—La semana pasada... Me fui a comprar un top nuevo que pudiera gustarle a Steve. Barb y yo tardamos todo el fin de semana. Parecía de vida o muerte, ¿sabéis? Y... Y ahora...
⠀⠀—Compras trampas para osos con Jonathan Byers y tu hermana —Jonathan terminó, cerrando el maletero.
⠀⠀—Sí.
⠀⠀—¿Qué es lo más raro? —Jonathan preguntó—. ¿Lo mío o lo del oso?
⠀⠀Nancy sonrió.
⠀⠀—Lo tuyo. Sin duda, lo tuyo.
⠀⠀Los dos se sonrieron, pero el bocinazo de un coche arruinó el momento.
⠀⠀—¡Eh, Nancy! —Reed, un compañero del instituto Hawkins, gritó desde el asiento del copiloto de un descapotable rojo—. Me muero por ver tu película.
⠀⠀Jonathan frunció las cejas.
⠀⠀—¿A qué ha venido eso?
⠀⠀—Sí, ¿qué quiere decir, Nance? —Carla miró a su hermana, confusa.
⠀⠀—No lo sé —Nancy respondió inexpresiva, antes de darse la vuelta. Como si algo le hubiera llamado la atención, la chica empezó a alejarse del coche y a caminar hacia el cine.
⠀⠀—¿Qué? ¿Qué? Eh, ¿adónde vas?
⠀⠀Carla persiguió a su hermana y se quedó boquiabierta cuando vio de qué había estado hablando Reed, qué era lo que Nancy estaba mirando horrorizada.
⠀⠀En la marquesina del cine, escrito con aerosol rojo brillante para que todo Hawkins lo viera, aparecía "Protagonizada por Nancy La Zorra Wheeler", bajo un nuevo estreno titulado La clave del éxito.
⠀⠀Carla sintió que se le desencajaba la mandíbula, porque ¿quién coño haría algo así? Llamar puta a una chica a la cara era una cosa, pero rociarla para que todo Hawkins lo viera era simplemente cruel, especialmente cuando no era cierto.
⠀⠀Los transeúntes dirigían miradas sucias a Nancy, murmurando y burlándose de ella mientras leían la marquesina. La chica Wheeler tenía una mirada de traición, de dolor, entrelazada en su expresión de sorpresa, y todo lo que Carla quería hacer era gritar a quienquiera que hubiera hecho esto porque era simplemente cruel...
⠀⠀Riéndose.
⠀⠀La mandíbula de la chica se apretó aún más y sus puños se cerraron a su lado cuando oyó la risa familiar de nada menos que el puto Tommy Hagan y el sonido de la pintura en aerosol.
⠀⠀—Espera...
⠀⠀—Tommy, tienes la letra de un crío de tres años.
⠀⠀—¡Cállate!
⠀⠀—Creía que no sabías escribir.
⠀⠀Carla no estaba segura de cuándo empezó a dirigirse hacia el callejón, pero en cuestión de segundos se encontró caminando hacia cuatro caras conocidas.
⠀⠀Tommy. Carol. Nicole. Steve.
⠀⠀Le dolía ver a Steve de pie junto a Tommy y Carol, saber que él lo había dejado pasar. El hecho de que le hubiera roto el corazón era su propio problema, pero si era sincera, confiaba en que Steve estaría ahí para Nancy ¿y esto era lo que hacía? ¿Escribir insultos en la marquesina? Puto patético.
⠀⠀—Vuestro humor debe estar roto, porque eso... —Carla hizo su aparición, viendo como las cuatro cabezas se giraban en su dirección. Señaló con un dedo hacia la marquesina—, no tiene gracia.
⠀⠀—¡Pero mira quién es, la señorita me gusta que los pervertidos me hagan fotos! —Carol se animó, con una expresión divertida en la cara. Miró hacia su novio, que estaba rociando la pared a su lado—. Quizá deberíamos escribir eso después.
⠀⠀Carol entonces miró detrás de Carla, notando a su hermana que venía detrás de ella, una mirada disgustada y enojada fijada en su cara.
⠀⠀—Ohh, hola princesa.
⠀⠀—Oh oh... ambas parecen cabreadas —Tommy imitó con tristeza.
⠀⠀Nancy cargó directamente contra Steve, y Carla no la detuvo mientras levantaba una mano y abofeteaba a su novio en toda la cara; la chica, de hecho, tuvo que ocultar su sonrisa porque el Harrington se lo merecía.
⠀⠀—¿Cómo narices se te ocurre? —Nancy disparó.
⠀⠀—¿Cómo se me ocurre? Eso tú. Estaba preocupado por ti —Steve replicó, con la cara dura pero de alguna manera llena de dolor infligido mientras se burlaba—. ¿Te puedes creer que estaba preocupado por ti?
⠀⠀—¿De qué narices estás hablando? —exclamó Nancy, confundida por toda la situación.
⠀⠀Carol se adelantó, interviniendo:
⠀⠀—Yo de ti no mentiría, guapa. No querrás que te conozcan como la zorra mentirosa, ¿verdad?
⠀⠀—Cierra la puta boca, Carol —escupió Carla.
⠀⠀—Hablando del rey de Roma —afirmó Tommy, haciendo que todas las cabezas se giraran, viendo como Jonathan se acercaba a la escena. Saltando de la caja que había estado rociando, Tommy saludó amenazadoramente—. Hola.
⠀⠀Al encajar las piezas en su mente, Nancy se enfrentó de nuevo a su novio.
⠀⠀—Fuiste a mi casa anoche.
⠀⠀—¡Premio! ¿No le vais a dar un premio? —Carol sonrió, Tommy la rodeó con un brazo.
⠀⠀Una vez más, Jonathan era la causa de una discusión entre Steve Harrington y su novia; una vez más, la chica era acusada de ser infiel.
⠀⠀Ahora, Carla podía ver que lo de anoche parecía raro. Ver a tu novia sentada en su habitación al lado del friki de todo el colegio podía disgustarte, o preocuparte que no fueras el único pero... Steve no debería haber supuesto así como así, o haber escrito que era una puta antes de conocer la historia por completo. ¿No había visto también allí a Carla?
⠀⠀—Escucha, no sé qué es lo que viste, pero no es lo que crees —Nancy se defendió, tratando de hacer entender que ella y Jonathan no habían estado haciendo nada romántico, que ella no lo había engañado.
⠀⠀La cara de Steve no mostraba más que dolor.
⠀⠀—¿Y qué, le dejaste subir a tu habitación a... estudiar?
⠀⠀—O para otra sesión de fotos pervertidas con Carla también —comentó Tommy. Carla apretó los puños para intentar mantener la calma, pero se estaba enfadando cada vez más.
⠀⠀Nancy lo intentó de nuevo.
⠀⠀—Estábamos...
⠀⠀—¿Qué hacíais? Termina la frase —Steve cortó, acercándose a la Wheeler, ligeramente por encima de ella—. Termina la frase.
⠀⠀Carla sabía que su hermana estaba en una situación horrible porque si admitía haber "cazado monstruos" parecía una mentirosa, y si no decía nada, parecía culpable.
⠀⠀Nancy permaneció en silencio, incapaz de dar una respuesta razonable.
⠀⠀Decepcionado, Steve hizo un último comentario:
⠀⠀—Vete a la mierda, Nancy.
⠀⠀—Oh, vete a la mierda, Steve —Carla escupió, mirando a su ex novio con más odio que nunca. Este no era el chico del que se había enamorado, el que le dejaba flores en la taquilla y le pasaba notas por los pasillos como el idiota que era—. ¿Cuántas veces vas a acusar a tu novia de engañarte con Jonathan, eh? ¿Cuánto tiempo vas a tardar en darte cuenta de que un chico y una chica pueden ser amigos sin querer acostarse entre ellos?
⠀⠀Steve no tardó en responder:
⠀⠀—¡¿Qué sabes tú de lo de anoche?!
⠀⠀—Eh, todo. Yo estaba allí —Carla se quebró. Steve realmente debería haber hecho su investigación—. Yo estaba allí, y vi todo, bueno más bien, nada, de lo que pasó. Realmente deberías haber preguntado qué pasó antes de etiquetar a tu novia como una puta ante todo Hawkins, quiero decir, si estás siquiera seguro de que Nance va a seguir siendo tu novia después de que esto se resuelva, porque personalmente...
⠀⠀Jonathan agarró el brazo de la Wheeler.
⠀⠀—Vamos, Carla. Vámonos antes de que te pongas más nerviosa...
⠀⠀—¿Sabes, Byers? Estoy bastante impresionado —Steve empezó a divagar, claramente enfadado y lleno de emoción—. Te tenía por un marica, pero no eres más que un fracasado como tu padre —caminó hacia delante, empujando a Jonathan mientras el chico intentaba apartar a Carla, queriendo salir del callejón antes de que él y Carla se volvieran locos—. Ah, sí, sí, sí, sí. Sí, esa casa está llena de fracasados. No debería de sorprenderme de unos fracasados como tu familia.
⠀⠀—Steve, cállate —Carla arrancó el brazo del agarre de Jonathan, dirigiéndose hacia su ex novio. Dios, no entendía cómo había salido con semejante imbécil—. No tienes el puto derecho para hablar así de ellos.
⠀⠀—Apártate, Carla —el tono de Steve era bajo y casi amenazador.
⠀⠀—¿Por qué iba a hacerlo? No soy tuya para que me des órdenes. No soy Nancy, no voy a aguantar tu mierda —continuó la Wheeler, hablando antes de pensar bien sus palabras—. No puedes llamar puta a mi hermana y luego empezar a hacer comentarios sobre la familia de Jonathan cuando la tuya no es mucho mejor. Jonathan será pobre, pero al menos su madre hace tiempo para estar en su maldita vida.
⠀⠀La mente de Carla la criticó por el golpe bajo, pero sinceramente, ya ni siquiera le importaba. Sólo estaba cabreada.
⠀⠀—Carla, déjalo. Estoy bien —Nancy agarró el brazo de su hermana, pero la chica no se movió, mirando a Steve fríamente.
⠀⠀Su comentario pareció callar al Harrington por un momento, pero no tardó en empezar a lanzar comentarios crueles al Byers de nuevo, las palabras salían de sus labios más rápido que antes.
⠀⠀—Tu madre... Ni siquiera me sorprende lo que le pasó a tu hermano.
⠀⠀—¡Steve, cállate! —Nancy gritó al Harrington, que no escuchó en absoluto.
⠀⠀El Harrington volvió a empujar al Byers.
⠀⠀—Carla, siento decíroslo a ti y a Nancy, pero los Byers, tu familia es una desgracia para toda la...
⠀⠀Steve no tuvo tiempo de decir nada más antes de que sus palabras fueran cortadas por el puño de Carla.
⠀⠀La chica nunca había golpeado a nadie de ese modo; nunca había sido una persona violenta. Pero se sintió genial al ver cómo Steve remontaba el vuelo tras el golpe, claramente sorprendido por el impacto.
⠀⠀Antes de que el chico Harrington pudiera levantarse, Jonathan se abalanzó sobre él, lanzando también puñetazos. Carla fue empujada hacia atrás mientras los dos chicos empezaban a luchar entre sí en un ataque de furia que no podía detenerse.
⠀⠀La Wheeler observó cómo los dos chicos se desplomaban sobre la calzada del callejón, rodando uno encima del otro intentando luchar por el dominio. Carla nunca había presenciado una pelea entre dos chicos, y pensó que parecían bastante estúpidos, sin embargo, ¿cómo si no se suponía que iban a continuar? Desde luego, no civilizadamente. Había que poner a alguien en su sitio.
⠀⠀—¡Steve!
⠀⠀—¡Basta, Steve!
⠀⠀—¡Déjale en paz de una vez!
⠀⠀—¡Suéltalo, en serio!
⠀⠀Tommy se adelantó.
⠀⠀—¡Dale una paliza, tío!
⠀⠀—¡Levantad! ¡Parad!
⠀⠀Carol empujó a su novio hacia la pelea.
⠀⠀—¡Separadles, que se van a hacer daño!
⠀⠀El Hagan hizo lo que se le pedía y empezó a empujar a Jonathan, pero fue detenido por Steve, que extendió una mano, empujando a su amigo.
⠀⠀—¡Eh! ¡Eh! ¡Aparta! ¡Aparta!
⠀⠀Jonathan se lanzó a lo que Steve esquivó, este último correspondió el puñetazo enviando uno a la mejilla del anterior. La cara del Byers voló hacia atrás por un momento, Jonathan rápidamente asestó un golpe a la mandíbula de Steve, el chico gimió al recibir el impacto.
⠀⠀El Harrington no tuvo tiempo de lanzar otro puñetazo, ya que Jonathan se apresuró a lanzar uno él mismo, golpeando de lleno en la nariz del anterior; Carla estaba segura de que podría habérsela roto si el golpe hubiera sido tan fuerte como ella creía. El golpe hizo que Steve cayera de espaldas sobre el cemento.
⠀⠀El golpe pareció duro y la caída también, y Carla se encogió cuando Jonathan se subió encima del Harrington, agarrándole el cuello de la camisa con una mano y lanzándole puñetazos sin rumbo con la otra; la Wheeler podía oír las salpicaduras de sangre con cada golpe.
⠀⠀—¡Jonathan, para! —Nancy suplicó, insegura de a quién apoyar: Steve estaba siendo un imbécil, pero era su novio y no quería que le hicieran daño.
⠀⠀—¡Vale, Jonathan, ya has hecho bastante! Ha entendido el mensaje —gritó Carla, empezando a preocuparse por Steve.
⠀⠀Sabía que no debía hacerlo —él no se merecía su compasión y había sido ella quien le había dado el primer puñetazo—, pero su corazón anhelaba que Jonathan se apartara de él antes de que le causara graves daños cerebrales o le rompiera la nariz.
⠀⠀El sonido de las sirenas resonó en el callejón, provocando en los adolescentes un pánico aún mayor que antes.
⠀⠀—¡La poli! —gritó Tommy—. ¡La poli!
⠀⠀—¡Chicos! —gritó Nancy—. ¡Jonathan, déjale en paz!
⠀⠀—¡La policía! ¡Vamos!
⠀⠀—¡Jonathan, apártate! ¡Te vas a meter en un lío! —gritó Carla, con los ojos muy abiertos mientras los coches de policía entraban en el callejón, Jonathan todavía encima de Steve, lanzando puñetazo tras puñetazo sin pensárselo dos veces.
⠀⠀—¡Lárgate, Carol!
⠀⠀—¡Tenéis que parar!
⠀⠀—¡Jonathan, apártate!
⠀⠀Nicole y Carol gritaban, Nancy y Carla intentaban intervenir antes de que Jonathan se metiera en serios problemas: una Wheeler intentaba alejar a Jonathan mientras la otra trataba de arrastrar a Steve y levantarlo del suelo.
⠀⠀Tommy también estaba interviniendo, enfrentándose a Jonathan.
⠀⠀—¡Eh, ya ha tenido suficiente, tío! ¡Dije que ya tuvo suficiente!
⠀⠀Carla miró a su amigo, con las manos extendidas mientras intentaba retener al Byers con la ayuda de Tommy —sí, el Hagan la estaba ayudando.
⠀⠀—¡Jonathan, en serio! ¿Quieres noquearlo y meterte en más problemas de los que ya estás?
⠀⠀Los policías salieron de su vehículo y se acercaron a la escena, uno de ellos gritando:
⠀⠀—¡Niños! ¡Venga, parad!
⠀⠀Las palabras de boca de todos se mezclaron en una ola de caos, mientras los adolescentes y la policía intentaban apartar a Jonathan Byers y alejarlo de Steve Harrington.
⠀⠀Un agente intentó apartarlo, pero recibió un codazo en la nariz y salió despedido hacia un coche cercano. Carla se encogió de miedo, sabiendo que si no estaba ya metido en un lío, golpear accidentalmente a un agente sería la guinda del pastel.
⠀⠀—¡Oh! ¡Mi nariz!
⠀⠀Finalmente, el otro agente consiguió apartar a Jonathan a la fuerza y, sin dudarlo, Carla arrastró a su ex novio, deseando que saliera de allí antes de que el Byer tuvieran la oportunidad de soltarse y volver a ir a por él.
⠀⠀Steve lanzó una mirada de sorpresa a Carla: ¿realmente acababa de ayudarle después de gritarle? ¿Después de estar tan cabreada?, pero la chica ni siquiera le dio tiempo a decir nada más antes de empujarlo hacia Tommy.
⠀⠀—¡Marchaos!
⠀⠀El agente que había recibido el golpe en la nariz empezó a perseguir a los adolescentes huidos, lanzando una mirada fulminante a la Wheeler por haberles dejado escapar.
⠀⠀Oyó los gritos del otro agente y giró la cabeza hacia el vehículo para ver a Jonathan pegado a él, con las manos esposadas.
⠀⠀Nancy soltó un suspiro tembloroso y se tapó la boca con la mano para no emocionarse. Carla se acercó a ella y la abrazó, dejando que toda la rabia y los celos desaparecieran por el momento.
⠀⠀Las dos chicas bloquearon el caos mientras permanecían abrazadas.
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