CAPÍTULO DIECIOCHOﾠ✶ﾠtengo un secreto .

NO HABÍA NADA QUE JAYLENE ODIARA MÁS QUE EL SILENCIO TOTAL Y ABSOLUTO, así que cuando Lorelei se quedó callada después de que su hijastra le lanzara la dura pregunta, Jaylene supo automáticamente que su madrastra sabía claramente algo que ella no sabía, pero en lugar de obligarla a responder a la pregunta, decidió dejarlo así. A pesar de toda la curiosidad que corría por su torrente sanguíneo, no estaba de humor para otra discusión. La discusión que había tenido con Jason había sido suficiente para arruinarle el día. Y no necesitaba que empeorara.

⠀⠀Si no hubiera sido porque ella y John B habían quedado en verse esa tarde, se habría quedado en casa todo el día, pero en lugar de eso, salió de su casa exactamente a las cinco de la tarde, con las llaves del coche en la mano y tarareando para sí misma, frunciendo el ceño con desconcierto cuando vio a Sarah Cameron caminando hacia ella.

⠀⠀—Hola —la rubia saludó a la morena con una sonrisa en el rostro mientras se detenía en seco—. Eh, gracias por el consejo que me diste ayer. Por fin he roto con Topper.

⠀⠀Los ojos de Jaylene se iluminaron de alegría, y una enorme sonrisa se dibujó en sus labios al escuchar la increíble noticia que acababa de recibir.

⠀⠀—No puedo explicar lo feliz que me hace eso, Sarah. Estoy muy orgullosa de ti.

⠀⠀—Sí, era un poco idiota —Sarah asintió con la cabeza, incapaz de evitar sonreír debido a toda la libertad que ahora tenía. Hasta hacía poco no se había dado cuenta de lo tóxica que era la relación entre ella y Topper, pero se sentía aliviada por haberse liberado finalmente de ella. Esta vez para siempre—. Pero en realidad no es eso lo único de lo que quería hablarte —añadió, recibiendo a cambio una mirada confusa de Jaylene—. Estoy bastante segura de que mi padre sabe que no le pedí ese mapa de Tannyhill simplemente porque quisiera saber más sobre la historia.

⠀⠀—Entonces, ¿debería preocuparme? —preguntó Jaylene, sin entender muy bien si Sarah estaba tratando de insinuar algo.

⠀⠀—Lo dudo. Pero pensé que sería mejor decírtelo —Sarah se lo comunicó a la morena, encogiéndose de hombros mientras cruzaba los brazos sobre el pecho—. No es que me guste hacer suposiciones ni nada por el estilo, pero intuyo que hay amistad entre nosotras. Y los amigos deben apoyarse mutuamente.

⠀⠀—Oh, ¿así que esto es el comienzo de una amistad? La verdad es que nunca lo habría imaginado —Jaylene se rió entre dientes, sabiendo que las dos no tenían casi nada en común. Bueno, hasta ahora—. Mira, voy de camino al Cut. ¿Por qué no vienes conmigo?

⠀⠀El estado de ánimo de Sarah cambió inmediatamente al pensar que tendría que estar en el mismo lugar que su antigua mejor amiga, y Jaylene se dio cuenta enseguida.

⠀⠀—Eh, no creo que sea una buena idea. Kiara y yo llevamos un tiempo sin llevarnos bien. No tiene sentido echar más leña al fuego —sacudió la cabeza, sabiendo que no sería buena idea involucrarse—. Pero te agradezco el ofrecimiento.

⠀⠀—Seguro que todo irá bien, Sarah. ¿Qué puede pasar tan malo? Estoy segura de que vosotras dos podéis superarlo —Jaylene hizo todo lo posible por convencer a la chica de que se uniera a ella—. ¡Vamos! ¿Cuándo en la vida vamos a tener la oportunidad de vivir algo tan divertido?

⠀⠀—Sarah pensó durante unos segundos antes de ceder finalmente.

⠀⠀—Está bien, pero cuando Kiara diga algo, porque lo hará, le recordaré quién consiguió ese mapa.

JOHN B PERMANECIÓ EN SILENCIO DURANTE UN BUEN MINUTO CUANDO LLEGARON JAYLENE Y SARAH CAMERON. Sabía que debía agradecerle a Sarah por el mapa, por lo que no veía ningún problema en involucrarla, pero sabía que una persona en particular pensaría de otra manera.

⠀⠀—¿Estáis seguros de esto? —preguntó Sarah, empezando a detestar la idea de tener que estar en el mismo lugar que Kiara.

⠀⠀—Sin tu ayuda, no habríamos podido conseguir ese mapa para descubrir dónde está enterrado el oro, así que sí. Tienes todo el derecho a formar parte de esto —John B respondió, sin saber muy bien cómo iba a desarrollarse todo este lío, pero hizo todo lo posible por mantener una actitud positiva—. Todo irá bien.

⠀⠀Después de intercambiar algunas palabras más, la rubia finalmente cedió y permitió que John B los guiara hacia el pequeño porche que había fuera de su casa.

⠀⠀Inmediatamente, las dos chicas recibieron miradas de Pope y JJ. No estaban precisamente preocupados por Jaylene, ya que sabían que ella y John B tenían algo entre manos, y porque ella había dejado claro que no quería ninguna parte del oro. Sarah, sin embargo, era un desastre a punto de estallar.

⠀⠀Jaylene se sentó en el sofá color crema y miró hacia John B., que se había sentado a su derecha.

⠀⠀—¿Cómo te ha ido? ¿Es tan espeluznante como dicen? —preguntó, refiriéndose a la casa de la señora Crain, situada cerca de allí. Era una de las más antiguas de la isla, lo que la hacía bastante conocida. Las historias sobre la anciana siempre le habían dado miedo.

⠀⠀—¡¿Pero qué me estás contando?! —gritó Kiara antes de que él pudiera responder, lo que provocó que Jaylene soltara un suspiro mientras miraba a la furiosa chica que acababa de salir de la casa—. ¿La habéis traído aquí? ¿Es que ahora está metida en esto? —se burló, mirando con frialdad a los tres adolescentes sentados en el sofá.

⠀⠀Jaylene se mantuvo callada, pensando que era mejor no provocar más a la chica enfadada. En cambio, escuchó todos los comentarios que los chicos tenían que hacer sobre la situación.

⠀⠀—No recuerdo haber votado nada —Kiara volvió a hablar, alzando la voz mientras señalaba hacia sí misma y los otros tres pogues que estaban allí—. Esto es algo nuestro. Es de los pogues.

⠀⠀Jaylene sabía que las palabras de Kiara también iban dirigidas a ella, pero aun así decidió mantener la boca cerrada.

⠀⠀—Todos estábamos muy cómodos hasta que las has traído —Kiara lanzó sus venenosas palabras hacia las dos chicas que estaban sentadas en el sofá, lo que hizo que Jaylene abriera mucho los ojos al darse cuenta de que la habían metido en esto. Sabía que solo era la ira de Kiara la que la dominaba, pero aún así se sintió herida.

⠀⠀—¡Deja de hablar de mí como si no estuviera aquí! —se defendió rápidamente Sarah, harta de todos los duros insultos que le lanzaban.

⠀⠀—Pues vete —Kiara respondió fríamente, sin ningún tipo de remordimiento en su tono.

⠀⠀Sarah chasqueó la lengua contra el paladar, burlándose mientras miraba a John B y Jaylene.

⠀⠀—Os lo dije.

⠀⠀—¿Qué les dijiste exactamente? ¿Que eres una falsa? —Kiara arqueó las cejas mirando a la rubia, enfadándose cada vez más con cada segundo que pasaba.

⠀⠀—No, que eres una zorra criticona —espetó Sarah, harta de escuchar todo lo que Kiara tenía que decir sobre ella.

⠀⠀Jaylene abrió la boca boquiabierta por la sorpresa y puso los ojos en blanco mientras veía a JJ sacar un billete de un dólar del bolsillo y apostar a que Kiara ganaría si se produjera una pelea física entre Sarah y Kiara.

⠀⠀—¡Que os calléis todos! —gritó John B antes de que la discusión entre las dos chicas pudiera continuar—. Kie, eres mi mejor amiga, ¿vale? Sarah también es mi amiga. Y Jaylene, tú... En realidad no sé qué somos, pero lo importante es que estamos todos juntos en esto.

⠀⠀—¿Así que ahora es tu amiga? ¿Y todo eso de que solo la usabas para obtener información? Pillar el mapa y pasar de ella —preguntó Kiara, con una mirada de satisfacción en su rostro mientras veía cómo la sonrisa de Sarah se desvanecía—. Oye, déjate de rollos, John B. Si se queda, me voy —Kiara volvió a hablar antes de que Sarah tuviera la oportunidad de preguntarle nada a John B.

⠀⠀—Ella nos ayudó a conseguir el mapa, Kie. No pienso hacer esto. ¡No puedo! —el Routledge estaba claramente frustrado con toda la situación, pero sus palabras solo sirvieron para enfurecerla aún más.

⠀⠀—No tengo ningún problema con Jaylene, pero ¿Sarah? ¿En serio? —la chica de pelo rizado se dio cuenta de que había involucrado a la chica de Rosewood en todo esto, así que le lanzó una mirada de disculpa—. Vas a tener que decidir. Porque, la verdad, eso me interesa mucho. ¿Ella o yo?

⠀⠀John B se encogió de hombros, sin querer elegir porque no le veía sentido.

⠀⠀—Las dos.

⠀⠀Con eso, Kiara le lanzó una mirada de decepción a su mejor amigo antes de salir furiosa, lo que provocó que todos intercambiaran miradas hasta que Pope y JJ decidieron soltar algunos de sus comentarios infantiles.

⠀⠀Sarah levantó una ceja mirando a John y Jaylene, que estaban sentados a su derecha. Estaba claro que los dos se equivocaban cuando le dijeron que todo iría bien.

⠀⠀—Todo irá bien, ¿eh? —se burló, levantándose del sofá para ponerse de pie—. Yo me piro. Así charláis. Ya me diréis —habló mientras se alejaba, dirigiéndose hacia la otra salida antes de que nadie pudiera protestar.

⠀⠀Tras unos segundos de silencio, Jaylene abrió los labios para hablar.

⠀⠀—Sí, yo también me voy. Tengo que ir a un sitio, y parece que tú y Kie vais a tener que hablarlo —Jaylene se levantó del sofá, sin ganas de seguir allí—. Adiós, John con la innecesaria B. Avísame si necesitas algo —le dio un rápido beso en la mejilla, lo que provocó que JJ y Pope hicieran ruidos de disgusto hacia los dos, así que Jaylene les mostró el dedo corazón—. ¡Oh, madurad! —gritó, despidiéndose del trío con la mano por última vez antes de dirigirse hacia su coche.

⠀⠀Como se había marchado justo después de Sarah, vio de refilón a la rubia que caminaba delante de ella, lo que la llevó a acelerar el paso para alcanzar a la Cameron.

⠀⠀—Oye, ¿quiero saber por qué os tenéis tanto odio la una a la otra?

⠀⠀—Probablemente no. En realidad es un poco infantil —admitió Sarah con sinceridad, frunciendo los labios mientras ella y Jaylene se dirigían hacia el Range Rover—. Y prefiero no hablar de ello.

⠀⠀—De acuerdo —Jaylene asintió con la cabeza, comprendiendo, y abrió las puertas con el mando para que las dos pudieran entrar en el coche con el interior rojo—. Tengo que hacer una parada rápida antes de volver a Kooklandia. Hay alguien a quien tengo que ver.

—¿DE QUIÉN ES ESTA CASA? —preguntó Sarah con curiosidad, asomando la cabeza por la ventanilla mientras Jaylene salía del coche.

⠀⠀—Mis abuelos viven aquí —le dijo Jaylene a la chica, mordiéndose nerviosamente el labio inferior antes de suspirar—. No tardaré mucho. Ahora mismo vuelvo —añadió, obteniendo un asentimiento a cambio, lo que le permitió alejarse de la chica para dirigirse hacia la puerta principal y llamar al timbre.

⠀⠀Poco después, Florence abrió la puerta y recibió a la chica con una gran sonrisa antes de permitirle entrar en la casa.

⠀⠀—Pensé que te habíamos asustado.

⠀⠀—¿Por qué me mentisteis? ¿Y por qué Mark me llevó directamente a sus diarios? —Jaylene no se molestó en suavizar sus palabras, ya que había perdido toda confianza en su abuela—. ¿Por qué me dejasteis conseguir la única prueba que demuestra que mi madre no murió de una sobredosis?

⠀⠀Florence apretó los ojos con fuerza y juntó las manos con un suspiro.

⠀⠀—Hay algo que tienes que entender, Jaylene...

⠀⠀Jaylene negó con la cabeza, sin querer escuchar más excusas de nadie. Las excusas la volvían loca.

⠀⠀—¿Por qué no me cuentas cómo murió realmente mi madre? ¿Qué sentido tiene ocultarlo? Ya le he pedido a Peterkin que me consiga su expediente, así que el informe de la autopsia me dirá la causa de la muerte.

⠀⠀—No vas a encontrar lo que estás buscando —Florence miró a su nieta directamente a los ojos, sintiéndose de repente inquieta.

⠀⠀Jaylene frunció el ceño, confundida, y entrecerró los ojos con una mirada fría en su rostro

⠀⠀—¿De qué estás hablando?

⠀⠀Una mirada culpable se dibujó en el rostro de la mujer mayor mientras se preparaba para lo que estaba por venir.

⠀⠀—Jaylene, no vas a encontrar nada porque ese informe de la autopsia no existe. Nunca existió.